Por ejemplo: En Florida, EU, abrieron un nuevo centro de detención de ilegales. Un parque nacional de ciénegas y pantanos en el sur de Florida. Se conoce con el nombre de Everglades.
Y en la entrada, el Departamento de Seguridad Nacional coló un meme gigantesco con caimanes gigantesco con gorras de beisbol en la cabeza custodiando la nueva prisión.

PASAMANOS: Mientras, y en rara y extraña paradoja, un par de “polleros” quedaron en prisión de por vida luego de la muerte de 53 (cincuenta y tres) indocumentados.
Los caimanes, todos en posición de combate. Con la dentadura como guillotina y cuchilla por delante, mostrando los dientes fatídicos.
Y con la mano derecha en posición de combate.
Los defensores de derechos humanos la calificaron de “una horrenda falta de humanidad” (La Jornada).

CORREDORES: Claro, la feroz persecución de la policía migratoria contra los indocumentados (por ahora) rebasa por la izquierda, el centro y la derecha a los caimanes.
Y ni se diga a los rangers, los famosos ex combatientes de las guerras de EU en el otro extremo del mundo facultados para cazar migrantes en el paso por el desierto como testimonia el filme “Desierto” con Gael García Bernal como migrante y con unos compañeros cazados por los exsoldados como si se tratara de una cacería de palomas y patos.

BALCONES: Un meme insultante. Sin ninguna consideración humana. Sin el básico respeto a la vida.
La burla. La mofa. El autoritarismo. El escarnio.
La soberbia en el ejercicio del poder. La altivez. El famoso “Aquí mando yo”.
Y en contraparte, la política mexicana reducida a cacarear en el discurso oficial y en la homilía de “La mañanera del pueblo” que los migrantes significan el sostén de la vida económica en el país vecino.
Y como boletina la secretaría de Relaciones Exteriores que “los nuevos cónsules deben estar más cerca que nunca” cuando eso y nada son sinónimos.

PASILLOS: Cada vez, el presidente de EU continúa sorprendiendo con su política migratoria.
Más cuando apenas, apenitas, han pasado cinco meses y tiene a los migrantes “patas arriba”.
Y lo peor, a los presidentes de cada una de las repúblicas con ilegales en tensión cardiaca. Sorprendidos y atónitos. “Veinte y las malas” sin saber el siguiente paso.
Más por tratarse del presidente de la nación más poderosa de la tierra. (lv)