Los días contados
1 (Crónica de una Fiscalía disminuida)
Todavía le quedaban cuatro días a García, el góber Rey de la Salsa y el Danzón, y en el Palacio Legislativo le asestaron tremendo jab.
Un diputado local, y de MORENA, presentó iniciativa de ley para reducir el periodo de la Fiscalía General de nueve a cuatro años.
La fuerza política de Cuitláhuac, en el pantano. Mejor dicho, en el limbo. Mejor dicho, en el infierno.
En el rincón más arrinconado del infierno.
Derecho. Derechito. Lapidario.
Más, mucho más, quizá, quizá, quizá, porque la Fiscal General anduvo de dama de compañía de su mecenas, Éric Patrocinio Cisneros Burgos, coronando a las flores más bellas del ejido en una especie de precampaña para quedarse con la candidatura guinda y marrón a la gubernatura.
Los días, pues, contados, para la Fiscal General.
La historia reproduciéndose a imagen y semejanza del pasado.
Luis Ángel Bravo Contreras, con Javier Duarte de góber precioso, nunca pudo concluir los nueve años.
Madrazo de Miguel Ángel Yunes Linares lo renunció.
Jorge Wínckler tampoco alcanzó sus nueve años de Fiscal.
Madrazo de Cuitláhuac García lo llevó, incluso, al penal de Almoloya.
Ahora, la cuchilla en contra de la señora Verónica Hernández.
Justicia poética.
Justicia justicia.
La leyenda bíblica en su más alto esplendor: “Los carniceros de hoy serán las reses del mañana”.
Más, porque la procuración de justicia Veracruz está “patas arriba”.
El sexenio de Cuitláhuac entrando a la historia en el primer lugar nacional de feminicidios.
Y si la secretaría de Seguridad Pública nunca pudo achicar, disminuir, reducir el asesinato de mujeres con saña, barbarie, alevosía, ventaja y premeditación…
Otra partecita corresponde a la Fiscalía General, pues los malosos y malandros se “crecen al castigo” cuando feminizan mujeres y pocos, muy pocos, excepcionales, son detenidos.
Por eso, y entre otros hechos y cositas, las diez mil manifestaciones, mítines y marchas en el sexenio guinda por terminar.
Además, los más de seis mil desaparecidos que todavía están luego de que en el sexenio llegaran a más de dieciséis mil.
Y la existencia de 34 (treinta y cuatro) Colectivos, integrados con padres con hijos y parientes secuestrados y desaparecidos.
Antes del diputado de MORENA con la iniciativa para reducir la Fiscalía General de nueve a cuatro años, una legisladora de oposición, panista, apretó la Magnum contra la Fiscal Hernández para su destitución.
El círculo se va cerrando.
Hernández, siguiendo la huella y el rastro a su par de antecesores.
Jorge Wínckler y Bravo Contreras… estarán felices y dichosos.
Con todo y aquella frasecita memorable, citable, recordable y bíblica de “Aquí mando yo”.
Ta’gueno.
2 (La vida política es sexenal)
Bravo Contreras tenía buena química con Javier Duarte pero cortocircuito con Miguel Ángel Yunes Linares.
Wínckler buen karma con Yunes pero cortocircuito con Cuitláhuac García.
La señora Hernández buena química con Cuitláhuac y Cisneros Burgos, pero los cables cortados con la sucesora.
En México (ya se sabe), la vida es sexenal.
Y las tribus, aterrizando en el poder efímero de un sexenio suelen llegar con la espada desenvainada.
En el siglo pasado, un vocero, Víctor Cuauhtémoc Naranjo, fue jefe de prensa con par de gobernadores.
Fernando López Arias y Rafael Murillo Vidal.
La historia nunca se repite igual. Acaso en forma diferente.
El fin de un imperio y un emporio en Veracruz.
Jefa jurídica en el Ayuntamiento de Xalapa y la secretaría General de Gobierno con el maestro Reynaldo Gaudencio Escobar Pérez, la señora Verónica Hernández resbaló en la Fiscalía. (lv)