Se toparon con el infierno
**Relegados de MORENA
**Lección para Anilú
UNO. Toparse con el infierno
Hay para los militantes de partidos opositores en Veracruz dos grandes lecciones si se pasan a MORENA y/o a sus partidos filiales como el PVEM y el PT.
Por ejemplo, con los casos del diputado local, Fernando Arteaga Aponte, QEPD.
Y el caso de Elizabeth Morales, recién destituida como diputada local electa.
Simplemente, reproduciendo el modelo priista de la exclusión social a los políticos incómodos, indeseables y oportunistas.
Los dos, abandonando sus partidos (en ambos casos, el PRI) soñando con el paraíso terrenal.
El par, por desgracia, se topó con el infierno.
DOS. Expriista descarrilado
Fernando Arteaga militó en el PRI durante cuarenta años. El más alto cargo fue con su amigo Juan Maldonado Pereda, secretario de Educación con el góber Miguel Alemán Velasco.
Delegado priista en varias entidades municipales siempre celebró que en Tantoyuca había derrotado en las urnas al cacique panista, Joaquín Guzmán Avilés, con sus candidatos.
Pero nunca en el partido tricolor le vieron cara ni de candidato a diputado local ni federal, ni menos a presidente municipal.
Entonces, desertó del tricolor y cobijó en MORENA.
Y en MORENA luego luego le abrieron el camino a la curul local.
Y cuando diputado local pretendió reelegirse le cerraron la llave y se declaró independiente.
Y adiós, adiosito, a la luna de miel con el partido guinda y marrón.
El viejito del barrio lo diría del siguiente modo:
“Donde manda capitán no gobierna marinero”.
TRES. De la gloria al infierno
Cobijada en el PRI y alentada por la tribu política en turno, Elizabeth Morales, Elmo, pasó de conductora en TV Más a diputada federal.
Luego, a presidenta municipal.
Después, parece, soñó con la diputación local y fue imposible.
Así, dejó el tricolor y buscó una oportunidad en MORENA.
Digamos, la alcanzó a través del Partido del Trabajo, filial de MORENA.
Y el CEN del PT la encumbró en la curul local.
Pero…
CUATRO. Bajada del caballo…
El PT Veracruz argumentó la famosa “cuota de género” asegurado que en el caso le tocaba a un hombre.
Y le tocaba la curul plurinominal, aquella ganada sin hacer campaña, sin gastar un centavito y sin exponerse a una derrotita en las urnas.
Y el Tribunal Electoral favoreció al líder estatal del PT.
Y a ELMO, simplemente, se le cayó.
Y “haiga sido como haiga sido”, ni MORENA ni el CEN del PT defendieron su caso.
CINCO. Lección para Anilú
Por eso, y con todo y su experiencia política y legislativa y carrera meteórica, la ex priista Anilú Ingram Vallines de seguro caminará con tiento y con más tiento se pondrá el chaleco guinda y marrón en su precampaña.
Ya para que la gobernadora electa la pudiera ungir con un cargo.
Quizá esperando la bendición de Palacio Nacional con la presidenta de la república en funciones.
Cierto, y como cacarearon por ahí en MORENA, las puertas abiertas.
Pero las tribus reservando las llaves para tomar decisiones frías, muy frías, totalmente frías.
Los casos de Fernando Arteaga y Elizabeth Morales son lecciones partidistas y olvidarlas significa el peor error de un novato.
SEIS. El pastel para los cercanos
Además, es ley en cada partido político.
Y aun cuando el dicho popular dice que los enemigos enemigos son, pero también advierte que los peores enemigos suelen convertirse en amigos entrañables luego del Pacto de Los Montes, las mejores tajadas del pastel son para los cercanos.
Y las sobras (si quedan) suelen repartirse por ahí con la esperanza barata y ramplona de que antes de que el gallito bíblico cante tres veces habría un ascenso.
Y allá quienes crean… (lv)