Digamos, la pareja durante cincuenta años del filósofo Jean-Paul Sastre, “fue de todo y sin medida”, oh José José… Y vivió con el acelerador metido hasta el fondo… Y pasándose los altos en el semáforo…

ROMPEOLAS: Una vida honrando la canción de Ricky Martin de “La vida loca”… Y la canción de Yuri, “La maldita primavera”… Y la otra canción de Yuri… “Con el apagón/ que cosas suceden”… Con Simone, duetos, tríos y cuartetos… Casi casi como el tiempo en Estados Unidos de los hipiosos… Y los rockeros… Jim Morrison en el mundo de las drogas… También, claro, Marilyn Monroe… En todo caso, y como reza el Evangelio y repitiera el filósofo Enrique Peña Nieto: “Aquel libre de pecado que tire la primera piedra”…

ARRECIFES: Sin embargo, tiempo de “tirar cohetes… Y tiempo de recogerlos”… Tiempo “de sumar y tiempo de sumarse y tiempo de sumirse”… Simone, trascendiendo en el mundo cultural a través de libros y conferencias… Y disputas políticas… Y militancia social… Más de veinticinco libros publicados… Y ensayos literarios y políticos en la prensa mundial… Y en cada temporada de su existencia, con toda la energía positiva para estar, ser y trascender… Respetada maestra universitaria, las estudiantes terminaban enamorada de ella… Y en unos casos, la relación íntima… Es más, transfiriendo sus amantes alumnas al tálamo de Jean-Paul Sartre, su pareja…

ESCOLLERAS: Indicativo: siempre vivió y se mantuvo lejos de las tribus políticas de Francia… Ni siquiera, vaya, cuando el amigo André Malraux fue nombrado ministro de Cultura del presidente Charles de Gaulle y en par de ocasiones… Más todavía, cada uno por su parte y con feroz crítica a su papel público… Malraux siempre engreído, soberbio y petulante… Simone, siempre con bajo perfil… Lejos, incluso, de las estaciones televisoras y radiofónicas que soñaban con su comparecencia en los programas transmitidos…

PLAZOLETA: Una vida, digamos, con bajo perfil… Nada de cultivar el ego y el súper ego… Discreta… Es más, definiendo la raya con Sartre, pues, a todas luces, era más brillante, con una inteligencia incandescente y un talento extraordinario… Y en todo caso, de igual modo como cada sacerdote tiene su capilla con feligreses, también ella y Sartre como escritores… Ella, ocupada al cien por ciento con vivir… Simple y llanamente, vivir a plenitud… Además, sin lujos… Ni mansiones… Ni yates… Ni menos aviones… Muchos años viviendo en los cuartos de los hoteles… Y por lo general, con hoteles de cuatro y cinco estrellas… Digamos, los que podía ella pagarse… Y pagar, digamos, las escuelas donde la invitaban a una conferencia y/o presentación de un libro…

PALMERAS: En su tiempo de la vida loca, así caminó en los días y noches turbulentas y polvorientas.. Caray, y como ella misma lo suscribe, hasta bailando desnuda sobre barriles cuando era muchacha… Tiempo, además, cuando tuviera relación amorosa con una amiga… Y cuya historia cuenta en un libro… Los libros de Simone enseñan a tratar de vivir con plenitud… Y dignidad… Y hasta donde la moral familiar y personal de cada persona lo permita… (lv)