Más, por ejemplo, cuando a la Comisión de Justicia pertenece el senador obradorista, Manuel Huerta Ladrón de Guevara, y por ahora, ninguna prebenda.
Pero con todo y el feroz discurso de Claudia Tello, política por demás identificada con la gobernadora electa (de la que se afirma son comadres), el punto de la madeja está en la decisión de las tribus guinda y marrón cupulares y con sede en la Ciudad de México.
Digamos, y como reza el dicho popular, “la culpa en ningún momento la tiene el indio sino quien lo hace compadre”.
Sean las razones que sean, entre otras, de entrada, porque Yunes Márquez votó primero por la Reforma Judicial de AMLO y le dieron la secretaría de la Comisión de Justicia.
Y luego votó por transferir la Guardia Nacional a la secretaría de la Defensa y le dieron la secretaría de la Comisión de Energía.
Entonces, el discurso furibundo de Claudia Tello ha de tener como destinataria a la cúpula de MORENA en la Ciudad de México.
Mejor dicho, a los jefes máximos del poder político en turno.
Más cuando el antecedente es claro: En el viaje sexenal, AMLO, el presidente, vivió obsesionado con encarcelar a Miguel Ángel Yunes Linares por hipotético desvío millonario en la dirección del ISSSTE en el sexenio de Felipe Calderón Hinojosa.
Incluso, y desde una parte de la prensa le publicaron el rafagueo mediático en portada y a ocho columnas y con fotografía.
Después, el gobierno de Veracruz se lanzó en contra de los dos hijos.
Y con la mira en la cárcel.
En contra de Miguel Ángel hijo por falsificar documentos para el arraigo domiciliario en la ciudad jarocha y lograr la candidatura a la presidencia municipal.
Y en contra de Fernando Yunes Márquez señalado del presunto desvío de recursos públicos como alcalde jarocho.
Y en ninguno de los tres casos, la intentona obradorista procedió.
Ahora, Yunes Márquez senador de la república “entrando a la historia” como dijo la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo.
Además, diferido con par de comisiones.
La senadora Claudia Tello le hace al ensarapado.
Su Magnum ha de estar en contra de los jefes políticos de MORENA en el Palacio Federal.
Y en contra, claro, del coordinador senatorial de MORENA, Adán Augusto López Hernández, ex secretario de Gobernación y ex gobernador de Tabasco.
Y en contra del senador Gerardo Fernández Noroña, otro promotor de Yunes Márquez.
Y en esas andamos, incluso, en contra de AMLO y Sheinbaum por la apertura política a los Yunes.
“Haiga sido como haiga sido”.
¿Estará Claudia Tello actuando en nombre y/o por órdenes de su jefa, la gobernadora electa?
Sin duda, una mano, varias manos, están “moviendo la cuna”.

II (Pronóstico reservado el desenlace)

El desenlace partidista, político y social pareciera ser de pronóstico reservado.
Por ejemplo:
El posible arreglo entre las tribus Morenacas de la Ciudad de México y de Veracruz sobre los Yunes.
El posible acuerdo a que lleguen en el PAN los choques entre los anti Yunes y los Yunes.
El tiempo que durará el rafagueo entre las partes.
El posible manotazo de Claudia Sheinbaum sobre el caso.
Incluso, claro, operando en el subsuelo político.
El posible manotazo del obradorista Adán Augusto López, digamos, el operador número uno del reality-show con los Yunes y de los Yunes.
Si los Yunes son expulsados del PAN ¿serían admitidos en MORENA?
¿O migrarán al Partido del Trabajo, reproduciendo, por ejemplo, el modelo Manuel Bartlett Díaz?
Vaya… ¿Irían al Partido Verde?
Mucho, demasiado, excesivo tiempo político, social y mediático lleva el caso de los Yunes azules.
Y las partes bombardeándose entre sí como si se tratara del pendiente número uno en Veracruz y en el país.
Incluso, nunca los Yunes en la primera fila nacional como ahora.
Más, considerando que MORENA como partido político es el PRI del siglo XXI.
Las partes debatiendo sobre la política y la moral política y hasta por el futuro económico y social de la nación y de Veracruz.
Y de paso, hasta cacareando la lealtad a los jefes máximos de MORENA ya esté a favor o en contra de los Yunes. (lv)