Un pueblo extraordinario
I (Generoso y solidario)
Unos ciudadanos de Veracruz decidieron enfrentar el par de tragedias.
Una, en el rio Cotaxtla con dos niños ahogados.
Y la otra, en Álamo, en el norte del estado veracruzano, unos chicos lanzando el gran desafío de que cada habitante del pueblo “Adoptara un bache”.
En tanto, la autoridad, ni en cuenta.
Occisa y omisa.
Luis Velázquez
Peor tantito, represiva en contra de la generosidad y solidaridad de la población.
Con todo, quedó demostrado lo que antes, mucho antes, la población ha demostrado en el caso de los ladrones y rateros de casas habitación, tiendas, tienditas y comercios:
Integrar una red de vigilancia para cazar a ladronzuelos y raterillos.
En ningún momento, “justicia por mano propia”.
Al contrario, expresar que la población puede bastarse a sí misma.
Como la gran lección en el temblor de 1985 en la Ciudad de México cuando ante un presidente contemplativo y tibio, Miguel de la Madrid Hurtado, los vecinos de las delegaciones se lanzaron al rescate de defeños atrapados en los escombros de las casas y los edificios derruidos.
Una gran lección cívica.
Más que la misericordia y la caridad católica y apostólica, la famosa utopía de todos los tiempos de un pueblo hermano.
Mas, mucho más, tratándose de desgracias y tragedias.
De indiferencia, desdén y menosprecio de la autoridad a los problemas y pendientes sociales cotidianos.
Más cuando está claro que para los ciudadanos comunes y sencillos, con bajo perfil en sus vidas, lo único importante es la pérdida de un hijo secuestrado y desaparecido.
El hambre, la miseria, la pobreza y la jodidez de la mayoría.
El desempleo, subempleo y salarios pichurrientos.
La migración a Estados Unidos como alternativa para enaltecer la calidad de vida de la familia.
Vivir día y noche sin sobresaltos.
Más, mucho más allá de las declaraciones mediáticas del presidente de la república, el gobernador y los alcaldes y ediles anexos y conexos.
Los habitantes de Veracruz aledaños al río Cotaxtla y de Álamo han honrado a los ocho millones de paisanos.
¡Ah!, en el boletín oficial anuncian que Protección Civil, Comisión Nacional de Emergencia y Bomberos, buzos de Marina y policía de Cotaxtla, participaron en la búsqueda del niño ahogado y desaparecido.
En todo caso, es la obligación social y moral.
Sobre todo, moral.
El hecho indicativo está en los doscientos voluntarios.
El cadáver del niño estaba atorado bajo la palizada del río.
II (Gran lección cívica)
Una familia del estado de México fue al río Cotaxtla para un día dichoso y feliz.
Y cuando dos hijos gemelos, Catherin y Ángel, de casi 5 años de edad, se metieron al río las aguas los jalaron y se los llevaron.
Y se ahogaron.
Entonces, la intensa y frenética búsqueda de los padres y la gente en el río.
Al día siguiente pudieron rescatar el cadáver de la niña Catharín.
Pero el cadáver del niño se lo llevó la corriente.
Y durante siete días, una semana, la búsqueda desafortunada.
Y en la búsqueda participaron unos doscientos voluntarios.
Mujeres y hombres.
Con la más alta y limpia de las generosidades.
Y buscaron al niño Ángel en veinticinco kilómetros del río Cotaxtla.
Y por fortuna lo encontraron.
Indicativo y significativo:
Uno de los doscientos voluntarios de nombre Roberto Hernández Malpica, originario de La Capilla, municipio de Cotaxtla, encontró el cadáver de Ángel.
Una hermosísima lección humana.
Más, mucho más, por tratarse de un niño.
Y una niña, su hermana.
Más por el dolor y el sufrimiento de los padres y el resto de la familia cercana.
III (“Adopta un bache”)
En Álamo, en el norte de Veracruz, una morenista, Blanca Lilia Arrieta, es la presidenta municipal.
Y en la comunidad “Potrero del Llano” los chicos lanzaron programa social estelar.
Se llama “Adopta un bache”.
Y de inmediato, cada uno adoptó su bache.
Y a rellenar los baches luego de tanta tanta tanta tanta desidia de la alcaldesa.
Además, otros vecinos plantaron arbolitos en las calles.
Y la señora alcaldesa se encabritó.
Y ordenó cortar los arbolitos.
Así la 4T ejerce el poder y gobierna y manda.
Y, claro, asesta manotazos.
Estilos de poder de los Morenacos.
“Los Siervos de la Nación” del siglo XXI.
Los jefes de jefes, los chamanes, los tlatoanis, en el poder.
Aquellos (ajá) que “no son iguales” a los antecesores, priistas, panistas y perredistas.