Migrante pierde la vida en Estados Unidos
Era originario de Zongolica
Se llamaba Brando Segundo de Jesús. Tenía 20 años de edad. Estaba casado y con un bebé. De la sierra de Zongolica, municipio de Soledad Atzompa, se fue atrás de la utopía social en la tierra prometida, el paraíso terrenal, allí, ajá, donde los sueños, ajá otra vez, son posibles.
Estados Unidos.
Y se topó con la muerte.
Fue en un accidente automovilístico.
En Portland, Oregón.
Ahora regresará al pueblo en un féretro.
La familia, en la miseria, la pobreza y la jodidez, pide apoyo.
Un niño huérfano.
Una señora joven, viuda.
Todo, porque en Veracruz la política económica es, ha sido y será errática.
Incapaz de alentar la creación de empleos en las regiones indígenas, campesinas, suburbanas y urbanas.
Y si hay empleos, caray, con pichurrientos y miserables salarios.
Y sin prestaciones económicas, sociales y médicas establecidas en la Ley Federal del Trabajo.
¡Ay, pa’leyecita!