ROMPEOLAS: El candor, la inocencia y el rubor de Julissa, por ejemplo, en la película “Los caifanes” con Óscar Chávez, El caifán mayor… La belleza despampanante de María Félix con sus desplantes de mujer bragada y deseada en todas sus películas… La hermosísima cara de Sasha Montenegro, además su rostro (ojos de pantera en acecho, labios sensuales y barba partida), cien por ciento electrizante, en todos sus filmes, quizá, los memorables en las películas de ficheras, muchas al lado de Andrés García y Jorge Rivero…

ARRECIFES: La electricidad transmitida por Salma Hayek en su mirada y en el sabroso bamboleo de su cuerpo al caminar… La ternura y la inocencia de Edith González, la niña buena de todos los tiempos, y que alcanzara dimensión universal en la película “Corazón salvaje”… La apacible y serena belleza y sonrisa fascinante de Irán Eory… La exuberante belleza salvaje de Isela Vega, aquella que enloqueciera a la raza de Chiapas según crónica memorable de Carlos Monsiváis y casi la desnudan en el templete, a tal grado que la policía debió intervenir para rescatar de la locura apocalíptica con su cuerpo de tentación…

ESCOLLERAS: Julia Roberts, “cuya boca tan grande la hace más sexy” según describiera el maestro cronista, Ricardo Rubín, en su citable “A cien por hora”… Sharon Stone incendiando las pasiones volcánicas en la película “Instintos”… Y ni se diga la impresionante y tierna belleza de Demi Moore en “Propuesta indecorosa” con el galanazo Robert Redford… La sensualidad fina y exquisita, cortocircuito en el cuerpo humano, de Diane Lane en “Infidelidad” con el otro súper galanazo, Richard Gere… Los labios gruesos y sensuales, el misterio esplendoroso en su firma electrizante de mirar, la carita afilada con la caballera larga resbalando sobre el cuello, los hombros y el pecho de Marine Vacht, toda una revelación sexual en Europa luego… La baba se le caía a uno mirando y admirando a la hermosa, hermosísima Jacqueline Bisset..

PLAZOLETA: El impresionante sex appeal de Catherine Deneuve, alta, delgada, madura, segura, elegante, muy elegante, fina, y Michelle Marie Pfeiffer, bella, talentosa, ojos azules y verdes según la hora del día y antes y después de hacer el amor, labios delgados, sonriendo más con la mirada, seductora actuando como la mujer lobo y/o como la señora soltera y deseado y codiciada en “La edad de la inocencia”… Claro, Meche Carreño, originaria de Minatitlán, MORENA, morenita, con una sensualidad voluptuosa y avasallante, actuando, por ejemplo, en “La choca”…

PALMERAS: Gracias a ellas, entre otras, la vida ha sido y es bella… Y llevadera… Y bien pudiera escribirse que ha valido la pena vivir en el segundo tramo del siglo pasado y lo que va del siglo XXI… Más si se considera que la felicidad total y absoluta nunca ha existido… Al contrario, la dicha es un momento estelar en la vida humana y que necesita guardarse en el baúl de los recuerdos para evocarse y convocarse en los días de las vacas flacas y que son más, mucho más, que los días de las vacas gordas…