La extinción del duartazgo
•Sólo un hijo putativo de Javier Duarte ganó por la vía independiente
•Otros tres disfrazaron sus orígenes y quedaron en segundo lugar
•Movimiento Ciudadano los cobijó y lanzó como candidato
Por ARANTXA ARCOS
Los fieles seguidores del último ex gobernador priista en Veracruz, Javier Duarte de Ochoa, obtuvieron segundos lugares en las elecciones de este domingo 4 de junio.
Sólo uno salió favorecido en las urnas, omitiendo su historial y obediencia al Partido Revolucionario Institucional (PRI).
El municipio de San Andrés Tuxtla será administrado cuatro años por Octavio Pérez Garay, ex priista que se lanzó al ruedo pintado de azul en la entidad veracruzana.
Su victoria la consiguió al postularse como candidato independiente. Le funcionó, alcanzó 17 mil 148 votos, rebasando por 3 mil 403 votos a su oponente más cercano, el candidato de la coalición “Veracruz el cambio sigue”.
Rafael Fararoni Mortera, candidato a la alcaldía de San Andrés Tuxtla bajo las siglas del PAN-PRD, alcanzó los 13 mil 745 sufragios a su favor, le sigue MORENA con 9 mil tres votos y Movimiento Ciudadano 2 mil 948.
El ahora alcalde electo es hijo de Marina Garay Cabada, considerada como cacique priista en citado municipio. Su madre ya fue presidenta municipal de San Andrés Tuxtla, también ex diputada local y federal.
La omisión de sus raíces rojas se omitieron cuando consiguió 21 mil 628 firmas que presentó al Organismo Público Local Electoral (OPLE).
El órgano electoral las aprobó y validó su aspiración por la vía independiente para el proceso electoral 2016-2017.
Pérez Garay es ex diputado local por el distrito XXV correspondiente a San Andrés Tuxtla en la legislatura LXIII, donde fue presidente de la comisión de Juventud y Deporte, así como vocal de la comisión de Organización Política y Procesos Electorales.
En Martínez de la Torre se pone en evidencia otro posible “duartista” en extinción.
Eduardo Sánchez Macías participó como candidato de Movimiento Ciudadano a la alcaldía de citada demarcación, consiguió 9 mil 749 votos, insuficientes para rebasar los 11 mil 250 registrados a favor de José de la Torre Sánchez, candidato de la coalición PAN-PRD.
Sánchez Macías probó los beneficios del duartismo. Duarte de Ochoa es su primo, esposo de su pariente Karime Macías Tubilla.
Los patrocinios millonarios se probaron en sus empresas periodísticas, repartidas en la entidad veracruzana y que al conocer la debacle financiera una a una fueron cerrando sin respetar los derechos laborales a sus empleados.
En el último año de su pariente como gobernador, Sánchez Macías ostentaba el cargo de diputado local por el distrito VIII correspondiente a Martínez de la Torre.
Renunció a su partido y se declaró independiente. Al culminar el periodo legislativo, buscó refugio en el Partido Nueva Alianza (PANAL) donde lo lanzaron como candidato a diputado federal, sin repunte alguno.
La ambición lo orilló a desistir del PANAL en 2015 e iniciar en las filas del Partido Verde Ecologista de México (PVEM), argumentando que el PANAL estaba “secuestrado” por el secretario general de la sección 56 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE).
Su periodo en el PVEM duró menos de dos años, nuevamente declinó y se enfiló en Movimiento Ciudadano (MC).
Al inscribir su precandidatura y recibir la candidatura de la dirigencia estatal de MC denostó sus orígenes en el Partido Revolucionario Institucional (PRI) y despotricó contra su primo, esposo de su prima, Karime Macías Tubilla.
“Me salgo avergonzado de un partido que no tuvo la mano firme de haber llamado la atención de los gobernantes en turno, de haber sido negligentes, de permitir que pasaran seis años y no haber alzado la voz de hacerle notar al ex gobernador que estaba mal, ahí es corresponsable el PRI y el PVEM. Por mi parte me avergí¼enza haber formado parte de un partido que no tuvo la mano firme ni hacer valer los principios y estatutos internos” exclamó Sánchez Macías.
Tuxpan cuenta con otro “duartista en extinción”. Al igual que Octavio Pérez Garay, alcalde electo en San Andrés Tuxtla, Óscar Octavio Greer Becerra se candidateó como aspirante para la presidencia municipal por la vía independiente.
Greer Becerra recibió 10 mil 270 votos, 747 electores menos que el candidato panista Juan Antonio Aguilar Mancha, primo del dirigente estatal del PAN en Veracruz, José Mancha Alarcón.
El segundo lugar lo alcanzó sin mencionar su pasado. En 2001 laboró como presidente municipal de Tuxpan bajo las siglas del Partido Revolucionario Institucional (PRI).
Para 2003, tercer año de su mandato, ordenó cambiar las chapas y llaves de las oficinas del DIF Municipal para impedir el acceso a su esposa, Concepción Serralloga.
La decisión se debió al inicio de un divorcio entre ambos funcionarios municipales, a pesar de la renuncia presentada por su cónyuge al terminar de presentar el tercer informe de labores al frente del DIF Municipal.
Durante la aspiración para conseguir por segunda ocasión la presidencia municipal de Tuxpan, su hijo, Octavio Greer Serralloga sufrió un intento de secuestro que le causó severas lesiones en su pierna derecha.
Para la alcaldía de Tlacotalpan participaron dos militantes renegados de sus raíces. El ganador desistió de portar sus colores de nacimiento político, correspondientes al Partido Acción Nacional (PAN).
Se lanzó por la vía independiente y convenció a 2 mil 208 ciudadanos que votaron por su nombre, Christian Romero Pérez.
En segundo lugar, el tricolor continuó en los favoritos de los habitantes colindantes al Río de Las Mariposas. Esperanza Burello, candidata de la coalición “Que resurja Veracruz” conformada entre el PRI-PVEM consiguió dos mil ocho votos.
El número tres causó la extinción de otro duartista. El ex presidente municipal de Tlacotalpan, Hilario Villegas Sosa, no convenció por cuarta ocasión a los habitantes que gobernó en más de una ocasión.
Arropado por el partido Movimiento Ciudadano, 985 personas votaron por él en las urnas el pasado domingo 4 de junio.
"No es fácil pedir el voto cuatro veces, es muy difícil, más en estos tiempos de alta competencia, estamos muy optimistas, sentimos una percepción de que la gente, soy producto de ello, si algo me motivó a la política, estaba dedicado a mis actividades del campo, pero me impulsaron la misma ciudadanía a participar, siento que soy productores de ellos mismos y me veo con buenas posibilidades de conseguir el objetivo" expresó al promocionarse como candidato a la alcaldía.
Poza Rica será administrado durante cuatro años por Francisco Javier Velázquez Vallejo candidato del Movimiento de Regeneración Nacional (MORENA) favorecido con 30 mil 981 votos.
Le sigue César Ulises Rivera Garza con 14 mil 927 de la coalición PAN-PRD, Diana Fabiola ílvarez Salas con 7 mil 633 de la alianza PRI-PVEM y en cuarto lugar, el expriista y postulado por Movimiento Ciudadano, Pablo Anaya Rivera con 5 mil 762 votos.
Por segunda ocasión, Anaya Rivera buscó la presidencia municipal en la zona norte. Su primera incursión como munícipe generó una deuda de 100 millones de pesos en el periodo 2008-2010.
Al terminar su periodo fue llamado para ser titular de la Secretaría de Salud, los primeros tres años del Gobierno Estatal del priista y detenido en Guatemala, Javier Duarte de Ochoa.
En 2013, fue cesado cuatro días después de que la Auditoría Superior de la Federación (ASF) dio a conocer los resultados de la revisión de la Cuenta Pública de 2011, donde se detectaron irregularidades en la dependencia a su cargo.
El reporte de la ASF señaló que la Secretaría de Salud y Servicios Sanitarios de Veracruz (Sesver) no aclaró la aplicación de más de 72 millones de pesos destinados a servicios de atención del Seguro Popular.
Aún con su cese, Anaya Rivera apareció en una filmación exhibida por panistas que denominaron “Ladrones de elecciones”.
El escándalo designó al ex funcionario estatal del duartismo como un “mapache electoral” por el mal uso de padrones y recursos públicos en programas federales para favorecer al PRI en elecciones municipales
Por ser “mapache” se inició una denuncia penal en su contra y de otros priistas.
Hasta este proceso electoral de renovar las 212 presidencias municipales en Veracruz, empleados fieles a Duarte de Ochoa no consiguieron mantenerse en la función pública.
Los últimos sobrevivientes en el poder se encuentran en la función pública federal. Tal es el caso del diputado federal por el distrito 17, Cosamaloapan, Antonio Tarek Abdala Saad.
De 2012 a 2015 estuvo a cargo de la tesorería en la Secretaría de Finanzas y Planeación (SEFIPLAN) en Veracruz, labor que es mencionada en últimos días por desviar millones de pesos.
Y es que en la más reciente audiencia penal de la ex vocera de Duarte de Ochoa, Gina Domínguez Colio, se mencionó a Mario Villegas y Luis Manuel Salgado, presuntos encargados de firmar las órdenes de pago, mientras Tarek Abdalá Saad y Vicente Benítez González, de autorizar los pagos a medios de comunicación.
Los señalamientos corresponden al desvío de 105 millones 937 mil pesos de Gobierno del Estado a través de la Coordinación General de Comunicación Social.