El cura desterrado
•Incómodo en la Diócesis
•El más bueno y justo
EMBARCADERO: Uno de los sacerdotes más buenos y justos en la historia eclesiástica de Veracruz es don David Constantino García... Vivía su ejercicio religioso a plenitud, convencido del bien social... Incluso, y cuando desde el poder político y católico le injuriaban ofrecía la mejilla izquierda... Y cuando fue intrigado y calumniado por sus colegas en la Diócesis de Veracruz en el siglo pasado calló, aguantó vara, se inmoló en la vía pública y aceptó con humildad y sin respingar
Luis Velázquez
una especie de excomunión… Mejor dicho, destierro en la propia Diócesis…
ROMPEOLAS: Las elites en el poder lo excluyeron hasta de una iglesia como presbítero para oficiar misa, considerando que los curas están obligados a oficiar misa todos los días… Es más, anduvo de arrimado a uno que otro, pocos, los colegas que le ofrecían la parroquia para su misa, sin armar tos… Hombre cultísimo, bien preparado, cursó posgrado en el Colegio de Roma y nombrado secretario de la Diócesis, las malas entrañas se le fueron encima hasta descarrilarlo…
ASTILLEROS: Durante muchos años ejerció el apostolado en Soledad de Doblado y en donde fundara el FIF, Frente Infantil Católico, donde invitaba a los menores de edad y adolescentes para la doctrina, cierto, pero también, para el deporte, el basquetbol, que se jugaba en la cancha de la iglesia… Incluso, cada año organizaba un campeonato, convertido en una leyenda popular, pues ninguna autoridad, ni la municipal ni educativa, se aplicaban en el desarrollo deportivo… Y sin embargo, cuando fue reasignado en la ciudad de Veracruz, los sucesores en la parroquia dejaron morir todo por inanición… La política, decía Juan Maldonado Pereda, 4 veces diputado federal, “es un tragadero de hombres”… También la religión…
ESCOLLERAS: En el pueblo fundó grupo de mujeres católicas y de hombres, mayores de edad, conocido como la Adoración Nocturna… Una vez cada mes, los hombres velaban en la iglesia el Santísimo y se turnaban para rezar complementado con una especie de retiro… Y de igual forma, el par de instituciones desaparecieron a su partida… Quizá la envidia y el celo de los sucesores, acaso el ajuste de cuentas entre las tribus eclesiásticas, quizá desaparecer su rastro para crear y recrear un nuevo episodio, el caso es que dada su inteligencia incandescente siempre fue satanizado…
PLAZOLETA: En su tiempo en la ciudad de Veracruz escribió un artículo semanal en la prensa local… Creía, sentía, estaba convencido, de que la voz de la iglesia necesitaba amplificarse a través de los medios… Sus textos eran la mirada de un sacerdote, pero al mismo tiempo, buscando el sentido social… Nada de oficialismo ni de predicar desde el púlpito de la letra impresa… Los hechos de cada día sin tomar partido a favor ni en contra de nadie, más que de la persona humana…
PALMERAS: Vivía con la modestia del mundo… Alquilaba un departamento muy sencillo donde vivía solo… Una señora, mayor de edad, se encargaba de la alimentación y del aseo de la casa y del lavado y planchado de la ropa… Sus comidas eran muy sencillas… La sopita y el guisadito con tortillitas y agí¼ita de la fruta de la temporada… Vida frugal, sin lujos… La mayor parte de la vida la pasó escuchando a los demás y cuando se lo pedían, su palabra era prudente y mesurada… En estos días era su cumpleaños… Sus restos están sepultados en la iglesia La Lupita, en la ciudad de Veracruz, donde fue presbítero…