El PRI infantil y el PRI geriátrico
•Los viejos sectores tricolores (el campesino, el cenopista y el juvenil) han quedado rebasados. Es la hora de formar la realidad poblacional y formar tales comités para garantizar la vida priista hasta el año 2,500, como dijo Gustavo Carvajal Moreno
El PRI tiene un par de salidas claves para aumentar su militancia: una, formar el sector infantil, y la otra, crear el sector geriátrico.
Más aún si se considera lo siguiente: según el INEGI, en la tierra jarocha existen 800 mil personas de la séptima década y unos 3 millones y medio de niños, tan sólo digamos, échese cuentas de la población escolar de primaria y secundaria.
Luis Velázquez
Desde luego para el sector infantil necesitarán chambear más; pero, bueno, con los nietos de los abuelitos del PRI sería suficiente.
Y en el caso del sector geriátrico hay terreno fértil.
Por ejemplo, Carlos Brito Gómez y Manuel Ramos Gurrión están cumpliendo 83 años.
Y como todavía hacen militancia y sirven a los 8 millones de habitantes de Veracruz, trascenderían en la historia local si Alfredo Ferrari Saavedra los comisionara para tan generosa tarea que, además, garantizaría la vida del partido tricolor, como dijo Gustavo Carvajal Moreno en su tiempo, hasta el año 2,500, por ejemplo.
En la tarea anterior la siguiente generación priista pudiera echarles la mano, entre ellos, los siguientes:
Ranulfo Márquez, Ramón Ferrari Pardiño, Antonio Benítez Lucho, Gonzalo Morgado Huesca y Flavino Ríos Alvarado, quienes este año cumplirán entre los 64 y 68 años.
Incluso, podrían convocar a Fidel Herrera, tan lleno de energía y vitalidad, como el gurú y el tlatoani presidente consejero.
¡Ah!, para tal activismo y para facilitar, digamos, la tarea de recorrer la tierra jarocha de norte a sur y de ese a oeste, abrirían la puerta a Guillermo Zúñiga Martínez y Juan Nicolás Callejas Arroyo, cuyas edades están rebasando los 70 años.
Es más, tal cual hasta integrarían una nueva alianza generacional como denomina el senador Héctor Yunes Landa a todo los hectorizados.
Brito Gómez lleva camino andado, y más luego de su cónclave estelar en el salón Jesús Reyes Heroles del CDE del PRI en el registro de precandidatos al Congreso de la Unión, con el niño vendedor de dulces y chicles a quien menosprecio, vejó y humilló a la hora que le ofrecía los frutsis y cuya secuencia fotográfica tenía más de 400 mil registros en internet hasta anoche.
Y es que, bueno, si el encuentro del viejo político con el niño significó la aparición de una nueva estrella, el CDE del PRI habría de aprovechar el instante.
Malo si Alfredo Ferrari, tan visionario y sensible, deja pasar el hecho.
EL PRI INFANTIL Y EL PRI GERIíTRICO
El PRI tiene varios sectores, pero ya anquilosados, fuera de vigencia.
Por ejemplo, el campesino, el popular y el juvenil.
Pero hoy en el país más del 60 por ciento de la población es femenina, de las cuales un 30 por ciento son chicas menores de 30 años de edad. Un 40 por ciento son niños.
Por tanto, en la lógica de Miguel Alemán Velasco de que el político necesita reinventarse cada generación, es decir, cada diez años, para tener vigencia, también las instituciones y los partidos políticos.
Más cuando como ahora ningún partido voltea a mirar a los niños ni a los ancianos.
Incluso, pudiera decirse que si las canas se politizaran, un partido integrado con mayores de 60 años arrasaría solito en las urnas.
Y más porque a tal edad muchos están pensionados y necesitan una terapia laboral, en este caso partidista, para sentir que están vivos.
Por eso se explicaría el activismo político de Carlos Brito Gómez y Manuel Ramos Gurrión, ambos exlíderes priistas y los dos asesores políticos, el primero de Javier Duarte y el segundo de Érick Lagos Hernández.
Haga patria el PRI en Veracruz. Tenga visión de Estado y sentido futurista. Mire al porvenir; pero también observe el pasado. El PRI de los niños y el PRI geriátrico.
Dejamos, pues, la palabra a Ferrari Saavedra y ojalá en alguna noche de insomnio, libando con los amigos a la orilla del río Jamapa en la desembocadura al Golfo de México, tal posibilidad tome forma.
Quizá el reportero, decepcionado del PRD y de MORENA de Andrés Manuel López Obrador, hasta mude en priista ahora en el final de su vida, siguiendo la huella de Ricardo Flores Magón que fundó el partido Liberal y de Moisés Sánchez Cerezo, quien además de periodista y editor era un gran activista social…