y se dispuso a defender, no le salió bien la jugada porque el cuadro parisino terminaría reaccionando hasta el 39", cuando Bradley Barcola mandó centro desde la banda izquierda, para que al final aparecería Ousmané Dembelé y poner el global 4-3.

Fue hasta el 53" en donde cambiaría el rumbo del encuentro, el PSG dio la vuelta al marcador, con empate a 4 en el global. Vitinha aprovechó que estaba desmarcado y le pegó de larga distancia para anotar el segundo de la noche.

Después de dos minutos, Gundogan tuvo la oportunidad de acabar la serie, pero su disparo terminaría pegando en el poste, la desesperación parecía notarse dentro del Barca, por consecuencia, se fue expulsado el entrenador culé por hacer reclamos.

La pesadilla se hacía cada vez más notoria para el equipo local porque cinco minutos después del empate, Joao Cancelo derribó a Dembelé dentro del área, y por ende penal, que lo terminaría cobrando de buena forma el seleccionador francés Kylian Mbappé y dar la vuelta al marcador y a la serie 1-3, global 4-5, dejando callada a la fanaticada culé y la poca afición parisina estaba ilusionada y todo era una fiesta.

A pesar de tener un hombre menos y teniendo el resultado en su contra, el Barca tuvo unas cuantas ocasiones de gol, una de ellas la de Raphinha, quien hizo una buena jugada individual, pero al final su tiro pasó por un costado de la portería.

Fue hasta el 88" cuando todo acabó, una serie de rebotes dentro del área de los blaugranas, el balón le llegó finalmente a Mbappé y mandó el esférico al fondo de las redes, dando un grito de júbilo y ganando el partido 4-1, global 4-6.

Gracias a esto, el equipo dirigido por Luis Enrique avanzó a semifinales de la UEFA Champions League, con la esperanza y la ilusión de llegar a otra final del mejor torneo de clubes de Europa, con la mira puesta en Londres, mientras que el

Barcelona suma otra eliminación y la sequía de no ganar una champions sigue creciendo.